El pasado 3 de junio la empresa automotriz Ford informó al mundo que invertiría 2.300 millones de dólares para la producción de autos eléctricos hasta el 2026.
El objetivo de la compañía estadounidense es vender en los próximos 4 años más de 2 millones de vehículos eléctricos en el mundo, lo que supone un tercio de su producción mundial.
No obstante, la verdadera notica dentro del anuncio fue que Ford venderá toda su gama de autos eléctricos de forma directa y sin intermediarios.
“Vamos a ir a un precio no negociable, en las ventas 100% online. No habrá inventario, irán directamente al consumidor con una entrega 100% remota”, comentaba Jim Farley, consejero delegado de la empresa, durante la conferencia en EE.UU.
Con el modelo de venta directo a través de medios digitales la marca busca mejorar sus precios y márgenes, eliminando los costos de los concesionarios.
Esta estrategia es aún poco común en el mundo de los fabricantes automotrices tradicionales, no obstante, Tesla fue la primera empresa en implementarla en el 2003 y Volvo la aplicará a partir del 2030.
La experiencia de Tesla muestra que los clientes han aceptado exitosamente el nuevo canal de ventas, aunque eso no quiere decir que las personas no puedan probar o ver de cerca sus vehículos. Para ello cuenta con showrooms propios que le permite exhibir sus modelos.
La venta 100% digital es un componente más en un sistema de negocios que busca reducir la estructura de costos por parte de las casas automotrices.
Las declaraciones de los ejecutivos de Ford durante la conferencia también confirman que las plataformas de movilidad jugarán a futuro un rol esencial en el desplazamiento de personas. De hecho, el fabricante confirmó que preparan un modelo eléctrico específico para las flotas de compañías como Uber y Lyft.
“Los ingresos de las plataformas de movilidad compartida crecerán un montón. Y nadie ha construido un producto específicamente para ellos”, subrayó Farley.
